En la mañana de hoy, día 13 de noviembre, visita SuperLectorAlfa el autor de "Versos envenenados" y "1314, la venganza del templario", Francisco Javier Illán Vivas.
Francisco nació en la localidad de Molina de Segura (Murcia). Aparte de escritor también es crítico literario.
De sus manos han nacido la trilogía "La cólera de Nébulos" ("La maldición", "La oscuridad infernal" y "El Rey de las Esfinges"), los relatos "La isla y otros relatos" (Editorial Irreverentes), los poemarios "Con paso lento", "Dulce amargor", "Crepusculario", "Témporas", "A mi manera", "Equipaje ligero" y "El mendigo de la Place Vendome". También ha aparecido en las antologías "Londres", "Paris" y "Los mejores terrores en relatos".
Los textos del escritor invitado hoy se han publicado, aparte de España, en México, Estados Unidos, Argentina y Perú.
En el día de hoy hablaremos de "Versos envenenados" y "1324, la venganza del templario", las dos novelas publicadas con M.A.R. Editor.
Sin más preámbulos, comenzamos la entrevista a Francisco Javier Illán Vivas. Comenzamos en 3,2,1...
―Un
escritor, ¿nace o se va haciendo a medida que va pasando el tiempo?
Convencido de que el escritor
se va haciendo a lo largo del tiempo y, salvo raras excepciones, cuando más
escribe, mejora su calidad literaria.
―
¿En qué momento dijiste de empezar a escribir para que la gente te pudiera
leer?
Yo me recuerdo escribiendo
siempre, con el lápiz a cuestas. Desde mi más temprana edad. No sí si llegué a
pensar alguna vez que alguien podría leerme, es decir, publicar lo que
escribía. Fue una excepción, una casualidad de las que se dan pocas veces, las
que me llevó ante una persona, cartagenera ella, que dirigió mis pasos (o mis
letras) ante la editorial Nausicäa E.E. y a partir de ese momento fue cuando
empecé a pensar en publicar y, de hecho, publiqué mi primera obra, Con paso lento.
―
¿Has sentido desde siempre esa simpatía que se le tiene a las letras y a la
literatura en general?
Tengo mis dudas respecto a
esto. Puede que, en efecto, haya simpatía hacia las letras y la literatura en
general, pero si ves la realidad, es que cada día hay menos librerías, nos
despertamos cada mañana con el anuncio de que ha cerrado esta o aquella
librería.
―
¿Hay algún libro que te haya marcado a lo largo de tu trayectoria?
Siempre cito el primer libro
de mi biblioteca personal, El valle de
los mamuts, de Michael Peyramaure, en su versión original en francés. Pero
mis dos primeras lecturas fueron El
Quijote y La Biblia, los dos
libros que había en casa de mis padres.
―
¿Quién o quiénes son tus referentes literarios?
Depende del género literario.
En poesía mi referente es Luis Alberto de Cuenca; en la fantasía heroica, mis
primeras lecturas fueron las obras de Robert E. Howard; en fantasía, el genio
Tolkien; en el terror, H.P. Lovecraft; en los relatos, Edgar A. Poe…
lógicamente, mis primeras lecturas.
»Conforme he ido avanzando en
el tiempo y en las lecturas, mis preferencias y lecturas se han ido decantando
con autores más cercanos y ahora creo que hay pocos de la Región de Murcia, por
ejemplo, que no haya leído.
―Hablemos
en primer lugar de tu novela Versos
envenenados. ¿Cómo surgió la idea de esta novela?
Fue algo inesperado, ya que en
aquellos momentos no tenía pensado volver a escribir y, menos aún, en publicar.
Estaba más bien dedicándome a otra de mis aficiones, la música, en busca de
encontrar las sensaciones que hacía muchos años había dejado aparcado. Pero un
encuentro inesperado, cuando regresaba de una agradable tarde de playa, me
llevó a pensar en qué hubiese ocurrido si aquella tarde-noche de junio hubiese
ocurrido un altercado. Y, cuando llegué a casa, me puse a escribir, algo que no
había hecho en los dos o tres años anteriores. Se trató de un encuentro no
buscado con un grupo que estaban practicando cruising en la pasarela de madera del Parque Regional de Las
Salinas de San Pedro.
―Esta
novela combina dos géneros literarios que en principio son muy diferentes: la
novela o narrativa en sí, y por otro lado la poesía. ¿Piensas que los dos
géneros son, digamos, «buenos amigos» y se combinan fácilmente o, por el
contrario, resulta un poco difícil combinarlos? Este aspecto de combinar
narrativa con poesía me llamó gratamente la atención cuando leí Versos envenenados, de la que
próximamente hablaré en el blog.
Pues ha sido un éxito
combinarlos. Mira, cuando me llamaron del jurado del premio Wilkie Collins, una
de las cosas que les sorprendió fue que había conseguido convertir a la poesía
en «la banda sonora de los asesinatos», y que si, en algunas partes de la
trama, se quitaba el poema o la letra de la canción, la obra perdía su potencia
creativa. Con el paso del tiempo estoy más convencido de que hay letras,
poemas, que pueden formar parte de la trama de una novela negra y su
expresividad, su música interna, permiten dar explicaciones que al autor o
autora le costarían muchas palabras.
―La
poesía, ¿es capaz de sembrar el odio como sucede en la novela con dos mujeres?
¿Es esa la impresión que da al
leer la novela? Pues al contrario, yo he querido reflejar que es la poesía lo
que une en el lado del bien a ambas mujeres; y son los hombres las que las
separan, en el lado del mal. Si me permites esta simplicidad de la eterna lucha
del bien y del mal. Es por la poesía por la que se conocen inicialmente, es por
la poesía por la que mantienen la amistad, y es la rivalidad por los mismos
hombres la que las separan.
―En
la novela nos topamos con el inspector de policía Isco Vivas. ¿Qué destacarías
de este personaje?
El policía Vivas es el
complemento ideal para unir la vida paralela de Marta y Carmen. Es un hombre de
gustos refinados, pero no tanto como él piensa que los tiene. Es un policía
inteligente, pero no tanto como él mismo se lo cree y, de hecho, comete un
enorme error al final de la investigación, que le llevará a una situación muy
delicada que espero los lectores sepan perdonar que no lo cite. Y, entre medio
de todo eso, se ve empujado a una misión especial en el Ministerio del
Interior, tras el atentado del 11-M en Madrid, que le separará de la realidad
que le rodea y, eso tendrá sus consecuencias.
―
¿Hay algo de Francisco Javier Illán en Isco Vivas o tenéis características
distintas?
A Isco Vivas le gustan muchas
de las cosas que a mí me gustan, lo reconozco. Pero no es un trasunto mío.
―Pero
no solo escribes novela negra como el caso de Versos envenenados. También escribes novela histórica como es el
caso de 1314, la venganza del templario
con la que has logrado el Accésit del Premio Alexandre Dumas de Novela
Histórica. ¿Cómo surge la idea de escribir esta novela histórica?
Te aseguro que nunca tuve como
objetivo escribir una novela sobre templarios, ni tan siquiera una novela
histórica. Pero mi relación con Antonio Galera Gracia, una de las personas que
más saben del Temple en el mundo, y la lectura de todas sus obras a lo largo de
estos años, que puede me predispusieran especialmente a ello.
»Y un viaje a Aviñon, con la
visita de las dependencias que tuvo el Papa Clemente V, la explicación que nos
dio el guía sobre su vida, sus últimos años y su muerte, la que me llevó a empezar
a escribir sobre ese episodio en concreto. La ayuda de mi hija Azahara, que es
cirujana; y la de mi mujer, Toñy, enfermera, estudiamos entre los tres –sobre
todo ellas- los síntomas y qué fue realmente lo que llevó al Papa a la muerte.
Relacionado con ella, la muerte en un día de caza del rey francés Felipe el
Bello, y ya, creo, era inevitable enlazarlo con las muertes de Guillermo de
Nogaret y Guillermo de Plaisians.
―En
esta novela nos encontramos con el último Gran Maestre Jacobo de Molay. ¿Quién fue
Jacobo de Molay? ¿Cuánto tiempo estuvo frente al Temple?
Jacques Bernard de Molay fue
un francés, que ascendió a Gran Maestre de la Orden del Temple tras la muerte
de Thibaud Gaudin, convirtiéndose en el vigesimotercer y último Gran Maestre de
la Orden. Fue quemado en la Isla de los Judíos, París, el 18 de marzo de 1314.
Estuvo al frente del Temple desde 1293 hasta 1314, aunque otros historiadores
lo colocan un año antes, es decir, desde 1292, ya que su predecesor falleció el
16 de abril de ese año.
»Yo he querido destacar en la
novela lo que este hombre, nacido en 1240 ó 1244, con unos setenta años de
edad, que era ya entonces y para aquel tiempo, un ancianísimo hombre, tuvo que
soportar los más inhumanos tormentos a manos de la Inquisición, dirigida en
Francia por Guillermo Imbers, el auténtico inventor de las torturas, que su
perversa mente diseñó para utilizarlas contra miembros de la propia Iglesia.
»En ese aspecto he pretendido
que fuese un homenaje a sus siete años de cautiverio y torturas diarias.
―Para
escribir esta novela de templarios, ¿cómo fue el proceso de documentación? ¿Te
fue fácil encontrar información que te sirviera para escribir 1314, la venganza del templario?
Bueno, más que una novela de
templarios, es una novela histórica. Centrada en los meses finales de 1313 y en
1314. Nadie va a encontrar aquí descubrimientos inesperados, sino rigor
histórico. Si hay algún aspecto más o menos fantástico para el lector, es
porque no sea creyente (cristiano, me refiero). Pues los aspectos que se salgan
de la normal tienen su fundamento en el Apocalipsis
de San Juan, y así lo hago constar al final de la novela, con las citas
históricas y bibliográficas, de los versículos de La Biblia correspondientes,
si es el caso.
»La documentación fue
sencilla, como te he dicho, tras haber leído casi toda la obra de Antonio
Galera Gracia, tenerla en mi biblioteca personal, era fácil consultarla. Y,
ante las dudas que se me pudieron plantear a lo largo del proceso creativo,
siempre lo tuve ahí para llamarlo, escribirle, visitarle y que me las aclarase.
De todas formas, y a pesar de
esas ventajas, dos años, más o menos, llevó completar una novela que tiene sus
raíces muy clavadas en fundamentos históricos.
¿Qué responde esta novela?
Pues cómo ocurrieron las muertes, y debido a qué causas, del Papa Clemente V,
del rey Felipe IV el Bello, de Guillermo de Nogaret y de Guillermo de
Plaisians. También hay una pista clara de por qué los Templarios vivían tantos
años y qué hombre y qué mujer fueron los escasos apoyos que encontraron los
freiles que consigueron escapar de las garras del rey francés.
―Una
vez que has escrito novela negra y novela histórica, ¿qué te resulta más fácil
escribir: novela negra o novela histórica? ¿Por qué?
La novela histórica debes
ajustarte a unos parámetros que están ahí, que no puedes cambiar. Si yo fuese
catalán, sería más fácil, allí la historia se cambia a gusto de quien gobierna.
Pero soy murciano, y me gusta respetar la historia tal y como fue. Por lo
tanto, es más encorsetada para el creador literario, para el escritor.
»La novela negra, la novela en
general, da más libertad al autor para escribir como quiera, llevar la trama
para un lado o para otro, cambiar todo lo que quiera cambiar, y matar a los
personajes que quiera de la forma que quiera.
―De
todo lo que has escrito, aparte de las dos novelas de las que hemos hablado,
también has participado en varias antologías de todo tipo. ¿Con qué te has
sentido más cómodo: escribiendo en solitario o participando en las antologías?
He publicado de todos los
géneros, creo. Relato, cuento infantil, poesía, narrativa en general, ensayo…
en el único lugar en el que no me encuentro a gusto es en el teatro, lo he
intentado, pero confieso que no alcanzo los parámetros de calidad que me exijo
a mí mismo, por eso admiro a los autores y autoras que son capaces de escribir
teatro, que conozco a muchos.
»La participación en libros
colectivos y antologías es otra cosa diferente. Primero, porque los libros
colectivos significan un reto para muchos autores, al obligarnos a escribir en
periodos en los que la creatividad está un poco baja.
»Y las antologías ya son otra
cosa. Cuando un antólogo, de categoría reconocida, decide hacer una
recopilación de las obras de diferentes autores bajo unos parámetros
prefijados. Aquí se participa poco, es el antólogo el que decide qué escoge de
tu obra publicada.
―
¿Estás trabajando en algún nuevo proyecto literario?
Lo estoy, muy despacio, en una
nueva novela. Probablemente la que será mi última novela publicada. Me estoy
dando unos dos o tres años para terminarla.
―Desde
tu punto de vista, ¿cómo está el panorama literario (lectores/as, editoriales,
librerías, etc.) en la Región de Murcia?
En Murcia hay una riqueza y un
nivel enorme de creadores literarios. No te voy a decir nombres, pues
necesitaría varias páginas, toda la entrevista, sólo para hablarte de los
novelistas, por ejemplo. Como te decía anteriormente, puedo presumir de haber
leído a muchos, a todos creo que es imposible, pero sí a muchos de los autores
y autoras murcianos, y hay de una calidad envidiable.
»Cosas negativas: las revistas
literarias, las bibliotecas públicas, muchas veces las librerías, sólo apuestan
por firmas seguras, y podemos ver que se repiten, reiteran los mismos nombres,
cuando otros muchos están ahí, esperando que se les permita asomar la cabeza
para dar a conocer, con mayor difusión, su obra.
»El lector de a pie, debería
probar nuevas firmas, no centrarse en los nombres consagrados. Buscar más allá,
de autores y autoras con los que posiblemente se cruzan por la calle.
»Los clubs de lectura,
promocionar y leer más a los autores de la tierra. Son, somos, patrimonio
cultural de Murcia, escribimos desde Murcia y, en muchísimas ocasiones, sobre
Murcia. En las llamadas Maletas viajeras
debería garantizarse que siempre estén presentes las novedades de autores
regionales.
»La administración debería
apoyar esta veta de la creación cultural murciana, no con subvenciones, sino
que promoción en las Casas Regionales de Murcia por todo el mundo, en ferias,
en el Instituto Cervantes por el mundo, en una asignatura del Patrimonio
Cultural murciano, que se impartiera en los niveles correspondientes.
»Se debe potenciar la Oficina
del Escritor, una herramienta casi totalmente desconocida por los autores
regionales, y que aparece en la wed de la Comunidad Autónoma.
»La potenciación del autor
regional mediante las figuras de embajador
de la lectura, embajador de las
letras. Promocionarles a los niveles nacionales e internacionales
(Instituto Cervantes a nivel mundial, las casas regionales, etc.).
»En la línea estratégica de
hacer visible a los autores (a los artistas en general, pero aquí hablamos de escritura),
la potenciación de los espacios entre municipios y el intercambio de autores
locales sería un punto importante.
»En los eventos que se
convoquen y que tengan presupuestos o ayudas, o no, según, tipo Escritores en su tinta (Molina de
Segura), Semana Negra de Cartagena, Río de Letras (Blanca), Noches literarias (San Pedro del
Pinatar), etc. etc. siempre debería haber presencia de autores regionales.
»No obstante el puno anterior,
quiero llamar la atención sobre eventos tipo: Poetas a la cárcel,
(dentro del festival de poesía Deslinde en Cartagena, promovido por la
concejalía de cultura de la localidad), Poesía en las aulas, también en
Cartagena, para motivar la reflexión de los alumnos en la clase de Valores
Éticos; o libros en los hospitales, que deben servir para afianzar el
objetivo de promocionar autores regionales.
―Una
de colegios. ¿Piensas que los colegios fomentan correctamente la lectura o
deberían cambiar la forma?
Aquí te diría algo semejante a
lo que te he comentado con los Clubs de lectura. Los institutos, colegios, etc.
tienen sus actividades de encuentros con escritores y, casi siempre, son con
destacadas figuras a nivel nacional y, si es a nivel regional, los dos o tres
de siempre. Y no los saques de ahí. Y el posible lector no llega a conocer la
riqueza creativa que le rodea. Los ciclos de esta índole deberían incluir cada
año a autores y autoras diferentes.
―
¿Qué consejo le darías a aquellas personas que quieren empezar a escribir sus
primeras historias pero que, por diversos motivos, no terminan de dar el paso?
Que escriban. Como han dicho
muchos grandes creadores, que la inspiración les pille trabajando, escribiendo
en este caso. A todos los primeros escritos nos han salido fatal, seguro, pero
fueron por los que empezamos, y sobre ellos, escribir, escribir, escribir. Y,
casi tan importante: leer, leer de todos los géneros, leer. Leer. No comprendo
a esas personas que se definen como escritores y te confiesan que no han leído
a nadie, que ellos no leen. Es como si un albañil dijese que no necesita
cemento, o yeso, o agua.
―Para
finalizar la entrevista, la gente que la haya leído y que quiera adquirir algún
ejemplar de tus novelas, tanto de las dos de las que se han hablado aquí como
las que no han salido a escena, ¿de qué modo lo pueden hacer?
Si sigo con la editorial M.A.R. Editor es porque mis obras llegan
a todas las librerías de España en la primera o segunda semana de su puesta en
distribución, gracias a la distribuidora UDL, que hace llegar ejemplares hasta
a Amazon y, eso garantiza su venta en
el mundo entero.
»Pero si alguien está
interesado, que acuda a la librería de la esquina, que es la que debemos
apoyar, y allí lo pide, lo encarga, seguro que la distribuidora se lo pone a su
disposición en cuarenta y ocho horas.
Muchísimas gracias por la entrevista y por tu tiempo, Kiko. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias a ti. Ha sido un placer tenerte en el blog.
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