domingo, 31 de marzo de 2019

RESEÑA DE "JUEGO DE MÁSCARAS"


Hoy domingo SuperLectorAlfa vuelve a ir de la mano de la Editorial Atlantis para hablar de un libro un tanto peculiar (peculiar en el buen sentido de la palabra). En el día de hoy se habla de "Juego de máscaras" del escritor Rubén Fernández Uceda
En esta novela hay dos géneros literarios que se dan la mano: el género de la ciencia ficción y el género de la novela negra. Desde mi punto de vista, esta combinación que hace Rubén es lo que hace de "Juego de máscaras" una novela peculiar, tal y como he comentado antes.
La trama de esta novela, no se si existe el término pero lo voy a decir igualmente, ficcnoir transcurre en el planeta más famoso en los últimos tiempos: Marte. 
En la colonia de Marte, llegado un momento, empieza a suceder cosas extrañas. Para solucionar todos los problemas que van surgidendo a lo largo y ancho de Marte, llaman al inspector de la policía de Marte Nicklas Magnussen, quien se ve obligado a dejar el caso que tenía de tráfico de estupefacientes para centrarse exclusivamente en la desaparicón de un colono. Lo que me llama la atención de Nicklas Magnussen es su capacidad de saber quien miente y quien no por la visión que le aporta uno de sus ojos. Tengo que reconocer que la primera vez que leí el nombre de este personaje me vino a la cabeza el campeonato mundial de Fórmula 1 debido a que está disputando el torneo de automovilismo un piloto que comparte el mismo apellido que Nicklas Magnussen. Este piloto se llama Kevin Magnussen.
Este inspector contará con la inestimable ayuda de un agente de la autoridad que es destinado a Marte desde la Tierra llamado Sergio
Sergio, en poco tiempo se convierte, aparte del compañero de Nicklas, en amigo inseparable del inspector.
Estos dos no iran nunca solos a intentar dar caza al culpable. También contaran con la ayuda de María Roseau
En la novela se ve como en el mismo puesto de trabajo hay una persona que se quiere aprovechar de los fallos de la otra persona para poder ir ascendiendo en la organización de la empresa y, por contra, tenemos a la persona que va a lo suyo procurando hacer el trabajo bien sin querer, aparentemente, subir escalones en el organigrama de la empresa.
"Juego de máscaras" hace que el lector no pueda dejar de leer el libro. Es un libro que te mantien en vilo sobretodo cuando van apareciendo aspectos del pasado de cada personaje, este aspecto de la novela también me ha gustado porque de este modo, he podido conocer un poco el pasado de cada personaje y, desde mi punto de vista, es de agradecer.
Fianlmente, quiero felicitar al autor por saber combinar la ciencia ficción con la novela negra a la perfección.


FICHA TÉCNICA:

NÚMERO DE PÁGINAS: 337 Páginas.
AUTOR: Rubén Fernández Uceda.
EDITORIAL: Ediciones Atlantis.
ENCUADERNACIÓN: Tapa Blanda.
ISBN: 9788494873133 


SINOPSIS:


El inspector de la policía de Marte, Nicklas Magnussen, investiga un importante caso de tráfico de drogas cuando es reclamado para ocuparse de la desaparición de un colono. Apartarse del caso supone también apartarse de la carrera por suceder al actual capitán de la policía… Pero lo que parecía algo rutinario, toma un carácter siniestro al encontrarse restos de sangre de varias personas en las incineradoras de la colonia marciana. Nicklas, acompañado de Sergio, un oficial recién llegado al planeta, y su antigua compañera, María Roseau, deberán adentrarse en los bajos fondos de la colonia siguiendo la pista de los desaparecidos, chocando con la mafia y la alta sociedad que la controla. Acechando entre ellos, en los oscuros pasadizos bajo la colonia de Marte, el monstruo se oculta tras una máscara.

viernes, 29 de marzo de 2019

ENTREVISTA A PEDRO DIEGO GIL LÓPEZ


Hoy es viernes. En la tarde de hoy "viajamos" a la localidad murciana de Cieza para mantener una agradadble conversación con el autor de novelas como "Monambo" (Editorial MurciaLibro). Este autor es Pedro Diego Gil López nacido el 4 de abril de 1961 en Cieza.

Dicho esto, dejemos que Pedro se presente a los lectores de SuperLectorAlfa y dé respuesta a cada una de las cuestiones formuladas en SuperLectorAlfa. Empezamos en 3,2,1,....


- Para la gente que no te conozca, ¿quién es Pedro Diego Gil López?


Una persona de acción que tiene un trabajo solitario, donde puede pensar, de ahí que surja en él la necesidad de escribir, más que de hablar, de narrar, en vez de contar lo que ve, lo que oye, lo que imagina. Alguien que intenta encontrar esas aristas del conocimiento que se ocultan en la naturaleza de las cosas, que intenta depositar sus ideas en las formas que reconoce, para poder explicar su percepción de la vida.   


- Un escritor, ¿nace o se va haciendo a medida que pasa el tiempo?

Para existir hay que nacer. Un escritor, como tantas otras facetas humanas, se va haciendo, unas veces fácilmente, otras de forma abrupta, pero creo que, casi siempre, con esa lenta maduración que al final hace que se desarrolle el potencial suficiente, capaz de alentar un creador literario. Tiene que surgir esa voluntad, esa necesidad, una lógica empírica que aglutine los conocimientos adquiridos por el escritor.


- ¿Has sentido siempre simpatía hacia las letras?

La verdad es que sí, aunque no fuese muy consciente de ello. Desde muy temprano la palabra escrita ha despertado en mí los sueños. Al principio de todo, los comics con su correlación de imágenes y diálogos, cargados de onomatopeyas. Pero, muy pronto, los textos escolares de la asignatura de lengua y algunas obras literarias infantiles fueron metiéndome en este mundo fascinante.


- ¿En qué momento dijiste de empezar a escribir para que la gente te pudiera leer?

Creo que cuando uno empieza a escribir no es muy consciente de que la gente llegue a leerte, ese es mi caso, no obstante, cuando logras crear una obra consistente, como por ejemplo puede ser una novela, al finalizarla, tal vez, lo que más deseas es que alguien la pueda leerla. Respondiendo a tu pregunta, no es que empezara a escribir para que la gente pudiera leerme, más bien fue al revés, después de crear una obra uno se pregunta: ¿Por qué no dejársela a alguien que la lea? Te respondes a ti mismo que sí, que eso es lo mejor que puedes hacer, y a partir de esa decisión, tu implicación crece y se desborda, unas veces angustiándote y otras alzándote a ese pedestal del ego del que es tan fácil caer.


- ¿Hay algún libro que te haya marcado?

No me ha marcado ningún libro y a la vez me han marcado, prácticamente, todos los que he leído. Y casi todos los que voy leyendo dejan en mí su huella.


- ¿Quién o quiénes son tus referentes literarios?

Hermann Hesse
Es muy difícil decir cual son los referentes literarios de alguien que escribe. Yo creo que se van pasando ciclos, y que la lectura de una obra no se siente igual a una edad que a otra, ni con unos conocimientos dados, si estos no paran de crecer y evolucionar, como creo que sucede siempre. Yo me empecé mis raticos de lectura con las novelas de Julio Verne y Emilio Salgari, poco a poco, con los clásicos de siglo de Oro español, Cervantes, Quevedo, Lope de Vega. Leyendo poemas sueltos de Miguel Hernández, Alberti, José Hierro. Hasta que más tarde leí autores americanos: Cortázar y García Márquez. Recuerdo ahora las obras de Hermann Hesse: El lobo estepario, Viaje al Oriente, Shiddartha, En el balneario. Por ejemplo: Eugenia Grandet de Honorato de Balzac, Sonata de Primavera de Valle-Inclán, Los pazos de Ulloa  de Emilia Pardo Bazán. Y los escritores españoles recientes como Camilo José Cela con su obra La familia de Pascual Duarte o Jesús Fernández Santos con Extramuros. Y los escritores actuales como Juan Marse y su obra Últimas tardes con Teresa, Carlos Ruiz Zafón y la Sombra del viento, Javier Sierra o  Arturo Pérez-Reverte con sus amplios catálogos de obras. Y todos los que se me han olvidado.


- Hasta el momento, ¿cuántos libros escritos por ti han visto la luz? ¿Tienes alguno en el fondo del cajón esperando el momento más idóneo para que vea la luz?

He publicado dos novelas y dos relatos en antologías sobre la violencia de género y la economía. 



- Empecemos hablando de “El pergamino de Shamat”. ¿Qué se puede encontrar el lector en este libro?

Una novela historia de primera magnitud, como las estrellas, capaz de transportarnos al final del siglo XV, cuando el reino de Murcia era frontera con el reino musulmán de la Granada Nazarí. Y a unos personajes que luchan por sobrevivir y liberarse del cautiverio, dando de sí una aventura constante y una historia de amor sorprendente que hilvana la trama con un hilo de oro.


- En la novela aparece un juego o deporte de estrategia llamado ajedrez. Esto me lleva a preguntarte: ¿te gusta el ajedrez?

No solo me gusta, lo practico a menudo y ha formado también parte de mi vida. Soy Monitor de ajedrez y he dado clases a chavales, tratando de inculcarles la táctica, la estrategia y los valores de este juego que a la vez es un deporte mental.


- ¿Qué tiene en especial el pergamino que es el objetivo supremo del ejército que ataca la villa de Murcia?

Es un secreto que encierra la novela y que va desvelándose al final. El pergamino es el detonante de la novela, lo que hace que todo suceda, afectando tan decisivamente a los personajes que aparecen.


- ¿Cómo es la vida del joven Diego, protagonista de la novela?

Al principio, de joven, tiene una vida placentera, rica en emociones, donde adquirir conocimientos es lo primordial para él, y donde surge el amor y la fantasía. Pero todo cambia cuando es conducido como cautivo a Granada. Allí, madurará a golpe de látigo, conocerá el sufrimiento y la humillación de la esclavitud. Pero, con el tiempo, alcanza los mayores placeres y esa felicidad que todo ser humano ansía. 

 
- Pasamos ahora a “Monambo”. ¿Cómo surge esta novela?

Tal vez Monambo haya surgido de la empatía con esos africanos que aparecen en la televisión y luego vemos por las calles de manteros. También por la necesidad de saber lo que ocurre en África, conocer como es su gente, descubrir su geografía, sus paisajes, su música, con todos los olores y los sabores, con todo el asombroso colorido y toda la fuerza que transmite.


- El título de “Monambo”, ¿era el que tenías en mente desde un principio o le tuviste que cambiar el nombre en alguna ocasión?

Si, y no sé por qué, la magia de escribir, la sugestión, cosas que recuerdas y no sabes cómo las tienes metidas en la cabeza. Pero si, surgió y me gustó, deformar ese título de la mítica película de los años dorados de Hollywood, “Mogambo”.


- La mayor parte del libro transcurre en África. ¿Por qué África?

Es cómo lo de la última frontera, está ahí, nosotros la tenemos muy cercana, pero es un lugar basto, enorme, donde hay un sinfín de países, zonas climáticas diferentes, paisajes variadísimos, culturas diversas, y a la vez una riqueza humana insospechada, que solo vemos a través de esas noticias dramáticas que nos llegan, o bien de muerte y destrucción, de cataclismos y guerras atroces, o del acoso constante de miles y miles de personas al asalto de las vallas de Ceuta y Melilla, y hasta el incesante trasiego de endebles embarcaciones con gente tan indefensa arriesgándose al poder del mar.




- El libro de “Monambo” ha sido editado por la editorial murciana de MurciaLibro. Mi pregunta es, ¿cuánto tiempo transcurrió desde que mandaste el manuscrito a la editorial hasta que MurciaLibro vio con buenos ojos publicarte el libro? 

No lo recuerdo exactamente, creo que siete u ocho meses. Fran Serrano es un editor magnifico y pronto tuve con él una buena sintonía que dio de sí esta fantástica publicación. 


- Veo que, por tus libros, te gusta la historia. Ahora te pregunto, para escribir tus libros de temática histórica te tienes que documentar. ¿Cómo es esa fase de documentación? ¿Qué fase te resulta más complicada: la fase de documentación o la escritura?

Ninguna de las dos, disfruto con ambas, a la vez que escribes surge la necesidad de ir documentándote y la mejor forma de hacerlo es ir avanzando en lo que quieres plasmar, o sea, una cosa va unida a la otra, incluso se retroalimentan, elegir, seleccionar, buscar lo que quieres te hace meterte en la historia de una forma intensa, que de algún modo te hace vivir una experiencia, que si sabes hacerlo con la empatía suficiente, puede que sea casi como hacerlo viviendo la realidad, o por lo menos, aproximarte lo suficiente para poder conducir la narración hasta ese campo donde todo encaja y progresa hasta donde tú quieres llegar y donde esperas que los lectores se sumerjan.   


- Desde tu punto de vista, ¿cómo está actualmente el sector editorial? ¿Se puede seguir mejorando?

Yo creo que en Murcia ha dado pasos de gigante, a editoriales y editores que tienen muchas ganas de dar caña, con la editorial Murcia Libro, por ejemplo, o la Editorial Pluma verde, Ediciones Dokusou, Tres Columnas, etc. 


- Esta pregunta llevaba un cierto tiempo sin aparecer. Según tu opinión, ¿hacen bien los colegios en “obligar” a sus estudiantes a leer los libros fijados por el claustro o deberían de ser los estudiantes quienes propusieran al centro educativo los libros que más les llame la atención?

Yo creo que las dos formas son útiles para fomentar la lectura. Depende de la capacidad del profesor para despertar en sus alumnos las ganas de leer y la pasión por las letras. Además, es una labor muy importante, porque creo que es ahí donde hay que crear los buenos lectores, con suficiente capacidad crítica para que a su vez afronten la vida con ese bagaje cultural que representa la literatura.  


- A la hora de escribir, ¿tienes alguna manía?  
      
Muchas veces pongo música. Pero no, no tengo manías, me dejo llevar, hay veces que tienes más ganas o tras veces tienes menos. A mí lo que me ocurre es que me pongo en modo poesía o en modo prosa, según me apetece, según tenga el día, según mi estado de ánimo, según qué proyectos tenga, etc. 


20. ¿En qué momento del día sueles escribir?   
         
A todas horas, cuando puedo, quizás por la noche es cuando uno tiene más tiempo. 


21. Cuando te surge alguna idea para algún libro, ¿anotas esa idea en algún lugar o te la guardas en la cabeza sin necesidad de anotarla en ningún sitio? 
      
Solía guardármelo en la cabeza, pero me he dado cuenta que es mucho más practico anotarlo, porque la mente es muy influenciable y algo que has pensado, momentos después, tú mismo lo cambias sin darte cuenta, lo ves de otra manera, con otra palabras y muchas veces se pierde la esencia que querías retener. 


- ¿Qué ha sido lo mejor que te ha pasado desde que estás en el mundo literario? ¿Y lo menos bueno?   
      
Lo mejor que me ha ocurrido es conocer a un montón de escritores y poetas, todos excelentes personas, con las cuales, muchas veces, hemos intercambiado puntos de vista y hemos compartido nuestras experiencias y nuestros anhelos. También conocer a los lectores, hablar con ellos, responder a sus preguntas, a sus gustos y compartir con ellos tus ideas. Y quizás lo menos bueno sea presentar tus obras, darlas a conocer, la práctica de esta actividad, para lo que hay que estar bastante preparado y dedicarle mucho tiempo. ¡Y a mí lo que me gusta es escribir! Pero creo que una cosa esta muy relacionada con la otra si publicas algo, hay que tener en cuenta que hay detrás una editorial haciendo un papel muy importante y la forma de corresponder con ella es estando presente en todas las promociones que sean menester. 


- ¿Qué consejo le darías a aquellas personas que quieren empezar a escribir sus primeros libros pero que, por diversos motivos, no terminan de decidirse a dar los primeros pasos?

Que escriban y escriban sin parar, que comparen lo que están haciendo, que sean los mayores críticos con ellos mismos, que disfruten siempre con lo que hacen y elijan los temas que más les gusten y que más los llenen de las mejores emociones. 


- Para finalizar la entrevista, la gente que la haya leído y que esté interesada en adquirir algún ejemplar de tus libros, ¿de qué modo lo pueden hacer?  
     
Hoy en día a través de internet se puede pedir lo que quieras, mis dos obras (Monambo y El pergamino de Shamat) Se pueden adquirir fácilmente por esta vía, directamente a través de las páginas de la Editorial Murcia Libro, o por Amazon. Además de poder encontrarlas en papel, en formato libro. El pergamino de Shamat también se pude encontrar en Amazon en ebook Kindle. Y si alguien cercano quiere algún ejemplar, lo puede obtener dedicado a su persona.

lunes, 25 de marzo de 2019

RESEÑA DE "LEYENDO A TOLSTÓI HASTA ARRIBA DE ANSIOLÍTICOS"




De nuevo os traigo una nueva reseña. Hoy lunes os traigo la reseña de un libro no apto para cardiacos. Hoy hablaré de una novela que, por el título, llama la atención o eso es al menos lo que me ocurrió a mí cuando fui a coger esta novela para leerla y saber que trama tenía.
Y una vez que he leído "Leyendo a Tolstoi hasta arriba de ansiolíticos", tengo que decir que Manuel Fernández ha entrado en mi lista personal de aquellos autores que merecen la pena ser leídos. 
Para empezar, en esta novela de Atlantis Ediciones, el autor se centra en el típico villano de todas las novelas en vez de centrarse en el "lado bueno". El protagonista de esta novela, Ismael Carmona, quien tuvo una infancia un tanto nefasta, responde ante la sociedad de una manera espeluznante. La gota que colma el vaso de la vida de Ismael Carmona es la muerte prematura e inesperada de su padre y la llegada de un padrastro que se pasa más tiempo en el bar que en el propio hogar y que cuando está en el hogar es para vivir a cuerpo de rey sin mostrar ni un ápice de cariño ni a la madre de Ismael ni al propio chaval.
Este hecho hace que Ismael cometa un asesinato que, cuando leí la situación en la que comete el asesinato tuve la tentación de dejar de lado la novela porque me veía incapaz de finalizar su lectura. ¿Por qué tuve la tentación de dejar la lectura de "Leyendo a Tolstoi hasta arriba de ansiolíticos"? Porque la primera víctima de Ismael fue su propia madre a quien asesinó en venganza hacia su padrastro.
El lector que vaya a leer esta impresionante novela, porque hay que decirlo, es una novela muy adictiva, descubrirá que Ismael Carmona será capaz de montar una tapadera que le ayude a sembrar el pánico en la ciudad.
A pesar de todo lo mencionado anteriormente, a lo largo y ancho de la novela hay varias frases que llaman la atención, o por lo menos a mí me llamaron la antención. Al principio de la novela, más en concreto, en la página 9, Ismael cuenta su vida y, en un momento dado comenta del padre de Blanca que obligaba "a los novietes que osaban subir a pedir la mano de las doncellas les obligaba a jurar sobre el As y el Marca". Otra frase que me hizo gracia fue cuando Ismael es capaz de comparar todos los libros que ha leído en su vida con el famoso Everest. En un momento dado, haciendo un repaso de su vida, Ismael Carmona comenta "Me leí más de ocho mil libros en mi vida y eso sí que es un ocho mil instructivo y verdadero y no el Everest". Aquí le tengo que dar la razón al protagonista de la novela porque a mi tampoco me va lo de la montaña. Lo que me gusta a mi es pasear por la montaña o por cualquier otro lugar del planeta leyendo sin necesidad de moverme de mi rincón preferido de lectura. 
Dicho lo cual, os recomiendo que os leáis esta novela para averiguar que es lo que le puede pasar por la cabeza a un psicópata que lo único que busca es sembrar el pánico y el terror. 


FICHA TÉCNICA:

NÚMERO DE PÁGINAS: 250 Páginas.
AUTOR: Manuel Fernández.
EDITORIAL: Ediciones Atlantis.
ENCUADERNACIÓN: Tapa Blanda.
ISBN: 9788494956515

SINOPSIS:

Ismael Carmona, un chiquillo de doce años a quien la fortuna repartió mala mano, repasa su historia vital desde el día en que acaeció la muerte prematura e inesperada de su progenitor, en un pueblo perdido entre montes. De físico muy desagradable, huérfano de padre y con una mamá casquivana y descuidada que le introduce a un padrastro alcohólico y despectivo en el hogar, a Ismael, pobrecito de él, se le comienza a agriar el carácter y nublar la razón debido a tanto padecimiento. Hasta el punto de que, un día malhadado, acaba asesinando a su propia madre, dando comienzo con este primer atentado a una cadena aparentemente inacabable de crímenes sangrientos y vengativos.
Su mal control de las emociones y otras circunstancias perversas le conducen, de muy niño, a ser recluido en un internado, primero, y en un hospital psiquiátrico más tarde, donde entretiene las horas aplicado a la lectura de todo tipo de novelas y ensayos, costumbre gracias a la cual acaba formándose un carácter ciertamente cultivado a la par que cruel y violento.
Años más tarde, ya adulto Ismael y poco después de comenzar a desempeñar labores como fotógrafo ambulante en una empresa insignificante de Madrid, una serie de crímenes perpetrados contra muchachas jóvenes sume en el terror a la ciudad.  Los servicios policiales, pese al ingente número efectivos movilizados, caminan despistados en sus labores de captura del que ya se conoce en toda la capital como el Asesino del Ajedrez. Como última salida, desde la Jefatura Superior acaban reclamando los servicios del Inspector Sergio Núñez Kirkpatrick, integrante de la Brigada de Homicidios de Barcelona, un detective especialista en perfilación criminal.