En una inmensidad de ocasiones se dice que "con la Iglesia hemos topado". Lo he escuchado muchas veces. ¿Por qué he empezado esta reseña de esta manera? Porque, precisamente, en esta novela que es la segunda de Manuel Ríos San Martín que leo, los inspectores Martínez y Pieldelobo se topan con la Iglesia en el caso que tienen entre manos. El lector ya irá descubriendo, a medida que vaya leyendo la novela que es lo que pinta la Iglesia en "Donde haya tinieblas". Lo único que diré al respecto es que pinta y mucho.
Quisiera deciros que esta novela me atrapó desde el principio y hasta que no he llegado hasta el punto y final no he podido parar de leer. He tardado más tiempo de lo normal en leer la novela porque la he querido "saborear" de alguna manera. También me he sentido muy identificado tanto con el inspector Martínez como con la inspectora Pieldelobo porque, a medida que iba leyendo y conociendo un poco más a los personajes, me iba diciendo al mismo tiempo: "Nene, eres una mezcla de los comportamientos del inspector Martínez y de la inspectora Pieldelobo". Nunca me había pasado hasta ahora. De este modo, al menos en mi caso, se vuelve a cumplir aquel dicho que comenta que "siempre hay una primera vez".
Otro aspecto que quiero resaltar es sobre el inspector y la inspectora. Al principio, cuando el comisario les encarga el caso, se muestran un tanto recelosos a trabajar juntos, e incluso se muestran incómodos, pero avanza la novela y estos dos personajes, que son los que mayor peso de importancia tienen en la novela, se vuelven inseparables. Esto me llama la atención porque es una manera, desde mi punto de vista, de humanizar a los personajes, de hacerlos reales y creíbles.
La trama de "Donde haya tinieblas" hará que el lector viaje por Extremadura, Huesca, Madrid y Guipúzcoa para ayudar en la investigación que emprende la UDEV bajo el mando del inspector Martínez y de la inspectora Pieldelobo para darle caza al asesino en serie que siembra toda la geografía española de terror, sangre y venganza.
Para ir terminando, os quiero comentar que os leáis la novela si todavía no lo habéis hecho porque, sin lugar a dudas, "Donde haya tinieblas" os hará pasar unos ratos irrepetibles haciendo que os olvidéis de la problemática que tenemos en la sociedad.
Un thriller desconcertante que te atrapará
Solo un asesino en serie en tiempos de Instagram hará que dos policías se pongan de acuerdo: él, un boomer chapado a la antigua; ella, una milenial con ganas de cambiar el mundo
Una modelo de diecisiete años a la que le falta el ombligo desaparece en Madrid. Los inspectores Martínez y Pieldelobo se hacen cargo de la investigación, pero chocan desde el primer momento. Él es un padre cincuentón y caótico, tierno pero mordaz y un tanto anticuado; ella, una milenial combativa, inteligente y feminista.
Mientras recorren por España lugares misteriosos y templos en apariencia tranquilos, surgen dos hipótesis para desenmascarar a un asesino en serie: o la mafia rusa está detrás de una red de prostitución de lujo o hay un psicópata religioso que pretende enmendarle la plana al mismo Dios.
Este thriller plantea una reflexión irónica sobre la intolerancia, la dicotomía entre pecado y belleza, entre misericordia y castigo, y las relaciones entre el hombre y la mujer como dos seres destinados a entenderse desde el principio de los tiempos.
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